dolor prolongado

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Sufrir dolor prolongado pone nuestra vida patas arriba. Esta experiencia compleja acaba limitando nuestra habilidad para trabajar, para disfrutar, para cuidarnos e, incluso, para relacionarnos con los demás. Como consecuencia, muchos afectados se sientan solos, sin fuerzas y arrojados tristemente a abandonar la lucha contra el dolor crónico en Mallorca.

Afortunadamente, hoy en día encontramos una amplia variedad de tratamientos para aliviar el dolor prolongado, que hace que la vida de los enfermos y de sus familias resulte mucho más sencilla. 

Estas fórmulas, que incluyen por ejemplo la medicación o las inyecciones contra el malestar, se complementan con otras medidas sencillas que ayudan también a manejar el dolor. Es el caso de la actividad física (en función de las posibilidades del afectado), de concentrarse en el correcto descanso o de buscar rodearse de personas que nos hagan sentir bien.

Qué hacer si sufres dolor prolongado

El dolor trae consigo una sensación desagradable que puede extenderse en el tiempo, dificultando en gran medida las actividades diarias y causando, incluso, problemas de autoestima y de depresión. Caer en esta laguna suele resultar peligroso: actúa en contra de tomar las riendas para recuperar la vida y de buscar las herramientas disponibles para reducir las dolencias, total o parcialmente.

En este escenario, es importante ser consciente de que no estamos solos: todos sufrimos dolor a lo largo de nuestra vida. De hecho, nueve millones de personas conviven diariamente con dolencias crónicas en nuestro país. 

Asimismo, se hace necesario comprender el mecanismo de este dolor prolongado: una experiencia subjetiva, que tiene diferentes umbrales y tolerancias. Esto implica que nuestra experiencia individual tenga también mucho que decir en la forma en que experimentamos y expresamos este malestar.

Cuando buscamos soluciones, aceptar el dolor (comprender la vulnerabilidad) y que necesitamos ayuda e información para enfrentarnos a él se convierte en un paso fundamental.

En este contexto, la automedicación no tiene cabida. Es bien sabido que esta inclinación puede llevar a nuestra salud a experimentar una serie de riesgos y de efectos secundarios (el uso prolongado de ciertos medicamentos puede producir por ejemplo trastornos renales o hematológicos). De ahí, la importancia de recurrir siempre a expertos en dolor crónico o dolor prolongado en Mallorca para que nos ayuden con herramientas específicas para enfrentarnos a estos males.

Una de las claves para conseguirlo es visitar una clínica del dolor crónico en Mallorca para obtener un diagnóstico preciso y oportuno, que permita diseñar la estrategia más adecuada para hacer frente al malestar. El equipo de Aliviam Mallorca, referente en Baleares, consigue este fin abordando cada caso de manera individualizada y desde una visión médica, científica y multidisciplinar.

Una vez en manos expertas, es vital seguir las pautas marcadas por los médicos especialistas en dolor  prolongado (no todos los tratamientos funcionan por igual). A la medicación se sumarán otros métodos idóneos para abordar dolencias, así como ejercicios y movimientos de rehabilitación, de apoyo… ajustados específicamente a cada paciente. 

En el caso de Aliviam, apostamos por técnicas mínimamente invasivas contra el dolor en Mallorca, encaminadas a evitar la cirugía y la toma de fármacos adictivos para el malestar. Entre ellas, las infiltraciones en la columna vertebral para el dolor de espalda, los tratamientos por radiofrecuencia o las infiltraciones articulares para mitigar el dolor.

En el supuesto del tratamiento de dolor mecánico en Mallorca, es importante la constancia en la aplicación de las guías y terapias marcadas por los especialistas (por ejemplo, en el seguimiento de las pautas del Método Mckenzie para tratar los problemas musculo-esqueléticos).

Otras estrategias recomendables para llevar una vida saludable sin dolor prolongado son:

  • Mantener la actividad física y mental: hacer ejercicio diario en la medida de lo posible, mantener una postura adecuada, aprender a relajarse, mantener una actividad social positiva…
  • Seguir una alimentación saludable (pautas alimenticias variadas, sanas y equilibradas para aliviar el dolor)
  • Dormir lo suficiente y bien
  • Contactar con médicos especialistas en dolor en Mallorca para conocer los mecanismos del malestar y el abordaje más adecuado